Restaurante Escondidinho

Otro de los días que dedicamos a visitar el norte de Portugal, volvimos a Valença do Minho del que ya os he hablado. Después de hacer unas compras nos fuimos a comer a Sào Pedro da Torre, a pocos kilómetros de Valença dirección Vilanova de Cerveira.
En este pequeño pueblo hay un gran restaurante: Escondidinho, en el que puedes disfrutar de una buena carne o pescado a la brasa, además de carnes exóticas (cocodrilo, bisonte, avestruz, cebra, gacela, canguro...)

Nosotros nos decidimos por algo tradicional que, además, nos habían recomendado: Pulpo a la brasa, que estaba excepcional.

También tomamos Bacalao a la brasa (éste nos gustó menos pues quedó un poco seco...) y un entrecot de buey al punto muy tierno.

De postre: Tarta de frutos rojos y "Baba de camello"

El restaurante hace honor a su nombre, está un poco "escondidiño", pero una vez que sigues las indicaciones de Sào Pedro da Torre en seguida ves señales que te llevan hasta allí. Merece la pena. Las raciones son abundantes y el personal atento y agradable.

Si os interesa, dejo enlace para más información:  Escondidinho







Caminha. Portugal

Este verano dedicamos varios días a visitar algún pueblo del norte de Portugal. Ya os conté mi experiencia en Vilanova de Cerveira. Hoy os voy a hablar de Caminha, el pueblo portugués donde desemboca el río Miño (frente a La Guardia , Pontevedra)
Caminha es otro pueblo fronterizo en el que destaca la fortaleza junto al río. El día que estuvimos allí, lo estaban engalanado y preparando para la feria medieval que se celebraría del 20 al 24 de Julio. (Tomaremos nota de esas fechas a ver si otro año podemos ir…)

Para este evento, en la fortaleza se monta una especie de mercado, con caballerizas, y de los balcones cuelgan banderas y pendones.

Todo esto estaba preparado junto a la Iglesia Matriz, de estilo gótico con detalles renacentistas.

Si nos adentramos en el pueblo, pasamos bajo la Torre del Reloj, torre principal de las murallas medievales, y llegamos a la plaza Conselheiro Silva Torres en la que hay una preciosa fuente de la primera mitad del siglo XVI.

En esta misma plaza se encuentra la Iglesia de la Misericordia, del s. XVI de la que destaca su portada renacentista.

Después de dar un paseo por el centro histórico, volvimos a España. La vuelta la hicimos cruzando el río en un ferry que te lleva a La Guardia. Es una forma distinta de volver y más rápida! (el trayecto dura 10 minutos)



Desembocadura del río Miño. A la izquierda, Caminha. A la derecha, La Guardia

Y una vez en La Guardia nos acercamos al Restaurante Riveiriña ,del que ya os he hablado, a disfrutar de la calidad de sus productos y su buen hacer en la cocina.



Comer en La Haya

Con este post termino de contaros mi experiencia en La Haya.
Hay un tentempié muy típico en Holanda que son los arenques. Son unos peces que se comen crudos acompañados de cebolla o pepinillos. Se cogen por la cola y se comen de un bocado. Yo lo probé con cebolla, en un puesto que hay en la plaza Buitenhof (junto al parlamento). Me pareció muy rico, un poco fuerte quizás, con un sabor (y un olor) muy intenso. (A pesar de lavarme las manos en un pequeño lavabo que había en el kiosco, estuve toda la mañana con olor a pescado....)

Esto es lo típico en lo que a comida rápida se refiere. Pero yo quiero hablaros en este post de la plaza Plein, en concreto del restaurante Luden.

 

El primer día que llegamos, caímos allí por casualidad. Nos atendieron fenomenal y lo que comimos estaba riquísimo. Yo tenía ganas de probar las Biterballen (especie de croquetas de carne típicas de Holanda) así que las pedí sin dudar. También pedimos unos Nachos. Ambas cosas espectaculares.

Después de esta experiencia, volvimos otro día a cenar. Esta vez tomamos:

• Langostinos con ensalada, patatas, mahonesa y salsa rosa.



• Surf en turf: Carne de ternera con guarnición de verduras, patatas roseval y langostinos



 

•  De postre: Chocolate trío: macaron, mousse y helado de chocolate blanco

Como ya os comenté en el post anterior, en esta plaza hay muchas terrazas y bares. Es curioso que algunos locales, después de las cenas, se convierten en bares de copas sacando todo el mobiliario a la calle si hace falta. Esto lo vimos en Barlow, donde cenamos la primera noche una hamburguesa de las "de verdad". Rica, rica.

Pues esto os puedo contar. Una cosa!! no os despistéis con la hora si queréis cenar. A las 22:00 ya tienen las cocinas cerradas...

Plaza Plein



La Haya

Hoy os voy a contar lo que hemos visto paseando por la ciudad de La Haya. El centro se puede conocer a pie perfectamente (aunque el medio de transporte rey es la bicicleta), las distancias son cortas pero además tiene una red de transporte público fantástica, que te permite trasladarte de un lado al otro de la ciudad en poco tiempo.
Os comento como funciona:
tienes dos opciones de billete, uno válido durante una hora (cuyo precio es de 3,50€) y otro válido durante un día (6,50€). Este último es válido el día que lo sacas, sea la hora que sea. Los puedes adquirir en el mismo tranvía, tren o autobús, en unas máquinas a tal efecto, pero eso sí, con monedas pues no aceptan billetes. He leído en algún sitio que también los vende el conductor, pero yo he utilizado siempre la máquina..

Os muestro imágenes de la ciudad que hablan por sí solas:
Binnenhof o Parlamento es el centro de la política de Holanda. Se puede visitar por dentro y seguro que es muy interesante, pero hay que dedicarle un tiempo que yo no tenía. En cualquier caso, el exterior del edificio es precioso.

Junto al Binnenhof, está la plaza Buitenhof donde hay mucho ambiente de terrazas y bares. Aquí también está una de las entradas al Binnenhof.

Estatua ecuestre del Rey Guillermo II en Buitenhof



Al otro lado de esta plaza, junto al Parlamento también, está el Museo Mauritshuis del que ya os he hablado.

Salida del Binnenhof hacia el Mauritshuis

Junto al museo está la plaza Plein, también con muchas terrazas, donde puedes comer, cenar o tomar una copa...

En esta plaza comimos un día y cenamos otro, en un sitio muy recomendable que os contaré en otro post (yo y mi obsesión por no alargarme demasiado....)

Esta zona de la ciudad es ideal para ir de compras. Cuando estuvimos coincidió la Shopping Night. Los comercios estuvieron abiertos hasta las 12 de la noche ofreciendo grandes descuentos.

Aquí también está Du Passage, un precioso centro comercial que presume de ser el más antiguo da Holanda.

En La Haya también puedes visitar Chinatown.

Estando en la ciudad sede del Tribunal Internacional de Justicia, no podíamos dejar de ver el Palacio de la Paz, que se puede visitar por dentro reservando previamente. Al lado hay un centro de visitantes en el que obtienes toda la información sobre este edificio y las instituciones que hay en él.

En el exterior un llamamiento a la paz en el mundo: un gran banco con la palabra paz escrita en todos los idiomas:

Y, cómo no, este es el lugar en el que se encuentra la Llama de la Paz Mundial que se mantiene siempre encendida. Alrededor de ella están escritos las nombres de los 196 países que se unieron para crear el Camino de la Paz Mundial.

En la entrada al centro de visitantes hay un árbol en el que puedes colgar tu deseo de paz...

Otro sitio muy interesante para ver (y disfrutar) es el parque en miniatura Madurodam del que ya os he hablado también.

Por último, no nos podíamos ir sin conocer la playa de Scheveningen. Una playa de 3,5 km con una arena muy fina y, aunque no lo parezca por las fotos, con mucho ambiente.

Pequeña pero gran ciudad, me ha encantado. Ciudad con mucho que ofrecer, distinta, acogedora..

Me despido con más imágenes. No puedo quedarme sin compartirlas

Piano en el vestíbulo de la Estación Central. A disposición de cualquier viandante...